Las uñas del conejo, al igual que en los humanos, se mantienen en constante crecimiento durante toda la vida del animal y necesitan ser recortadas periódicamente. De no tenerse en cuenta este aspecto, las uñas alcanzarán una longitud que puede resultar incómoda para el conejo, además de ser afiladas, lo que puede causarle dolor e incluso lastimarlo.
Para recortar las uñas del conejo, será necesario efectuar una visita al veterinario de manera periódica, aunque en algunas ocasiones, y con la práctica debida, se trata de un procedimiento que podemos realizar también por nuestra cuenta. En este último caso, te damos las claves a continuación para proceder de manera adecuada.
No obstante, muchos propietarios de conejos prefieren la vía más segura, la del veterinario. Un profesional experimentado podrá realizar el trabajo de manera rápida, sin esfuerzo y con ningún, sino el menor dolor para nuestra mascota, evitándole así de sufrir cualquier tipo de estrés.
El coste para estos tratamientos no suelen ser caros, aunque recomendamos consultar previamente la tarifa de precios. Generalmente, los conejos en la naturaleza suplen esta necesidad mediante actividades de excavación y construcción de madrigueras, lo que desgasta paulatinamente las uñas y les permite mantenerlas recortadas.
En el caso de los conejos domésticos esto no sucede así, puesto que habitan la mayor parte del tiempo en alfombras y suelos de nuestro hogar. Pero podemos administrarles accesorios que hagan las funciones naturales de desgaste.
Una forma de mantener sus uñas en buen estado es asegurarnos de que el conejo cuente con abundante actividad física, carreras, juegos, entre otros. Para ello, debemos incluir en su espacio una zona pavimentada y un área para que el animal pueda cavar sus madrigueras y contribuir al desgaste de sus uñas de manera natural. En caso de solo poseer un área de césped, podemos optar por incluir una o dos baldosas pavimentadas o rugadas.
Por otra parte, aquellos que deseen ahorrarse las tarifas de los veterinarios y recortar las uñas del conejito en casa, deben tener en cuenta que se trata de una actividad delicada, compleja para personas sin experiencia, sobre todo en las primeras ocasiones. Muchas personas deciden recortar las uñas del conejo por su cuenta y terminan finalmente acudiendo al veterinario.
En otros casos, algunos criadores optan por consultar al veterinario para obtener una demostración práctica de cómo proceder. Esto permitirá tener una visión más clara para futuras ocasiones. La práctica constante permitirá adquirir la destreza necesaria. Adicionalmente, deberemos hacernos de tijeras adecuadas, así como conocer la posición correcta para el conejo y el modo de recortar sus uñas.
Si las uñas de nuestra mascota se encuentran ligeramente coloreadas, podremos alcanzar a ver los vasos sanguíneos en su interior, por lo que será mucho más fácil recortarlas, debiendo hacerlo justo antes de ese punto.
Para uñas de colores oscuros, se volverá mucho más difícil distinguir los vasos sanguíneos. En estos casos, y ante cualquier sangramiento debemos efectuar presión en la zona con un algodón limpio.
De manera general y además de las tijeras, necesitaremos toallas, hisopos de algodón y algún tipo de tratamiento para el caso en que cortemos accidentalmente las uñas del conejo. También será necesario un soporte para mantener al conejo en una posición fija (muchos criadores y propietarios envuelven al animal en una toalla para sostenerlo firmemente).
Es importante además sostener la parte posterior del conejo, para evitar que patee fuertemente. De esta manera, encontraremos también que es muy fácil manipular cada una de las extremidades por separado. Tampoco es conveniente sujetar al conejo por la cabeza o el cuello, pues nuestra mascota podría forcejear y terminar lastimado.
Debe recortarse solamente la punta de la uña. Es más conveniente recortar una pequeña porción de manera frecuente que abarcar una longitud mayor cuando las uñas alcancen un largo tamaño. Para proceder, sitúe las hojas de la tijera entre las uñas del animal, justo donde desea realizar el corte. Seguidamente, ejecute una presión suave y si el conejo se estremece desplace la zona de corte un poco más hacia la punta de la uña. Para hacer el corte, se recomienda efectuar un movimiento delicado pero a la vez firme, para evitar el aplastamiento de la uña.
Si se ha cortado demasiado profundo, no debemos entrar en pánico, simplemente limpie la sangre con un hisopo de algodón y aplique un poco de presión. También podemos hacer uso de algún cicatrizante como el Kwik Stop, o bien emplear maicena o harina de maíz en la punta de la uña y masajear lentamente.
En caso de que el conejo luche por zafarse o el procedimiento tome más de lo habitual, se recomienda realizar un breve descanso una vez terminada cada extremidad. Esto es particularmente importante si hacemos uso de una toalla para sostener al animal, en aras de evitar que se sobrecaliente.
Antes de finalizar y abandonar al conejo, revise minuciosamente todas las uñas para asegurarse de que no existe sangrado, o que éste se ha detenido.